Viajamos a Atenas cuando aún se percibían los efectos de la crisis financiera de 2008, pero recuerdo el carácter alegre, indómito y combatiente de los atenienses. Hacía pocos meses que había entrado en vigor la prohibición de fumar en los bares, pero en todos los bares de Atenas se fumaba y ellos se defendían afirmando que «si los políticos nos han fallado y nos han llevado a la ruina por qué vamos nosotros a hacer caso a sus leyes».
Desde el Partenon podías ver y oler la historia de la humanidad.